TERAPIA MIOFUNCIONAL

03/05/18

    En numerosas ocasiones las malformaciones de los órganos que conforman el aparato bucofonatorio requerirán de la correspondiente intervención quirúrgica reparadora (resecciones maxilares, eliminación de frenillo lingual, intervenciones en síndrome labio-naso-alvéolo-palatal, prótesis de ortodoncia…) Con posterioridad a esta intervención, y también en otros casos no tan complicados, que conllevan una alteración en la movilidad o sensibilidad de estos órganos, será necesario practicar, además, una intervención logopédica específica. Esta intervención debe estar encaminada fundamentalmente a la recuperación de la musculatura de estos órganos en relación a su sensibilidad, el tono y una adecuada elasticidad, que favorezca su  movilidad y la precisión necesaria para la ejecución de los movimientos finos propios de la fonación y del habla. De esta forma, los masajes, las movilizaciones pasivas y activas, los ejercicios de soplo, de succión y deglución, etc. serán la base de nuestra intervención logopédica.

    Cada una de las disglosias que encontramos requerirán de una planificación muy personalizada, con un diseño muy específico del programa en función del órgano afectado, de si ha requerido de implantación del algún tipo de prótesis ortopédica u ortodóncica, del grado de arfectación de la articulación y los fonemas alterados, posibles parafunciones e incluso,  de la posible afectación de otras funciones como la respiración o la audición.