21/04/19

En la mañana del últmo día de clase del Trimestre hemos logrado nuestro objetivo: pasarnos las 5 horas jugando todos juntos en perfecta armonía. El primer juego fue con el parchís con el objetivo del desarrollo del cálculo mental, dividiendo el grupo-clase en dos (cada uno con un profesor). La anécdota que pasará a la historia ha sido que un alumno aguantó las tres cuartas partes del juego sin poder sacar ninguna ficha de casa porque no le salía ningún 5. Aguantó la frustración sin cabrearse (cuando ese era su mayor priblema hasta el día de hoy) y con la empatía de sus compañeros. Para nosotros, sus profes, y para todo el grupo, ha sido una satisfacción. Los peques también jugaron a la oca...

Los segundos juegos también fueron: "Adivina qué animal soy" (objetivo: desarrollo del pensamiento, expresión oral, vocabulario, respetar el turno para hablar...) dentro del área de Ciencias Naturales y de Lengua en educación Infantil. Mientras educación Primaria jugaba con un juego de psicomotricidad (desarrollo de la estructuración espacial y la lateralidad).

Ambos grupos jugaron en tercer lugar a "Gastón Cabezón", un juego de desarrollo del sentido del tacto y de la motricidad fina. En cuarto lugar, hicimos juegos de estructuras rítmicas sobre la colchoneta para desarrollar coordinadamente el equilibrio y la concentración, también hicimos un juego con un globo pasando de un grupo a otro y evitando que se cayera al suelo (un grupo saltando sobre la colchoneta y otro fuera de ella). Después jugamos a poner la mesa y a hacernos una comida, que han demandado los alumnos, para luego comerla con mucha satisfacción.

Recogimos y salimos al patio a jugar a "La araña", "El gato y el ratón" y a "Los quemados" (juegos populares). Hemos jugado con alegría, sabiendo perder, ejercitando el autocontrol, la empatía, la ayuda al compañero y respetando las normas y los turnos de acción. ¡Una estupenda jornada de desarrollo de las intelogencias múltiples!